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| Obama brinda con cerveza en el desayuno previo a la cumbre del G7. (EFE). |
Krün, Alemania. La canciller Angela Merkel ha recibido en el pueblo bávaro de Krün al presidente estadounidense, Barack Obama, con un desayuno típico de salchichas y cerveza antes de la cumbre del G7 de hoy y mañana en el sur de Alemania.
El encuentro entre dos de los líderes más poderosos del planeta se ha escenificado cuidadosamente en el pintoresco marco de la localidad alpina, donde centenares de vecinos han esperado a ambos mandatarios en trajes típicos bávaros y con música tradicional.
En una mañana de sol y con los Alpes de fondo, la paz del pueblo de 1.900 habitantes se ha visto alterada por los helicópteros, el despliegue de seguridad y por fin la esperada llegada de Merkel y luego Obama. Ambos han sido recibidos con aplausos, gritos de nervios y fotos.
Tras ingresar en el libro de oro de la localidad, se han reunido con vecinos en la plaza del pueblo, engalanada con largas mesas y un conjunto interpretando música local con cuernos de los Alpes. Para la ocasión se han preparado 60 kilogramos de salchichas blancas y 500 litros de cerveza, componentes del típico desayuno bávaro.
Los dos líderes mantendrán luego un encuentro marcado por temas bilaterales, como el escándalo del espionaje exterior estadounidense que golpeó especialmente a Alemania, y asuntos internacionales como la crisis en Ucrania o el terrorismo islamista.
A continuación partirán al cercano palacio de Elmau, donde a mediodía comenzará la cumbre del G7 con Merkel, Obama y los líderes de Francia, Italia, Reino Unido, Japón y Canadá. (DPA),
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