Así, como el título que encabeza este escrito, hace unos años se transmitió en un canal local una producción cómica mexicana y hoy nos llega de repente esta pregunta cuando nos enteramos de que dos empresarios dominicanos fueron baleados al llegar a Haití con un cargamento de ayuda para socorrer a los sobrevivientes del terremoto que destruyó Puerto Príncipe el pasado martes 12 de este mes.
Carlos Gatta y Milton Matos, empresarios de San Juan de la Maguana, sin buscar protagonismo prepararon un cargamento, solo conocido por sus familiares, y se dirigieron al hermano país, pero fueron interceptados por una banda de delincuentes y tiroteados. Ambos se encuentran en estado grave en el Hospital Ramón de Lara de la Fuerza Aérea Dominicana.
Y la pregunta que tenemos que hacernos es ¿qué está pasando con la seguridad que debe recibir todo aquel que está haciendo esfuerzos por llevar ayudas a la capital Haitiana?
Mientras los dominicanos hacemos hasta lo imposible por ayudar irresponsables corresponsales de algunos medios extranjeros se dan a la tarea de desinformar y querer pescar en río revuelto, acusando a las autoridades dominicanas de cerrar la frontera y de otras mil diabluras más que solo están en las cabezas de esos enemigos del pueblo dominicano y del haitiano.
A esos infames los invitamos a involucrarse en las tareas de rescate del hermano pueblo haitiano para que vivan en carne propia la realidad y no la inventada por ellos desde la comodidad de un escritorio....
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