Talvez consciente de que la televisión era su vida y ya no estaría más en ella, el querido “Viejo Corpo” dijo estas palabras a su ex esposa Grisell, luego del reconocimiento que se le hiciera en sábado en Color Visión, para despedir su programa “Sábado de Corporán”
Alberto Caminero y Miguelina Terrero
“Grisell me llegó la hora cero” fue la expresión de Rafael Corporán de los Santos a su ex esposa después que el sábado pasado le hicieran un reconocimiento y despidieran su programa “Sábado de Corporán” los ejecutivos de Color Visión, Domingo Bermúdez y Manolo Quiroz, junto a artistas y comunicadores.
Esa fueron las primeras declaraciones de Grisell Báez para Hoy Mismo, por Color Visión, a las 5:00 de la mañana, cuando anunció al país la muerte del ícono de la televisión y la radio, el empresario Rafael Corporán de los Santos.
Dijo que Corporán murió de un paro cardíaco en la clínica Abreu a la 1:45 de la madrugada, donde estuvo con el hijo de ambos y al lado del merenguero Sergio Vargas. Explicó que estaba junto a su hijo cuando Corporán fue y lo buscó y se lo llevó a su habitación abrazándolo y besándolo, cuando se puso malo. Sostuvo que su hijo le alertó a las 11:30 de la noche: “mami corre que papi no se mueve, no hace nada”. “Lo llevamos a la clínica Abreu donde murió”, expresó acongojada Grisell, quien en ese momento señaló estaba todavía en shock por el suceso. Grisell y su hijo fueron los últimos que pudieron ver con vida a Corporán de los Santos, quien es definido como un profesional de éxito.
Corporán de los Santos nació pobre, se hizo rico con el trabajo tesonero y murió, no en la opulencia, aunque sí con lo necesario para vivir, porque todo lo dio a los más necesitados y a los que le extendieron la mano. Empezó como limpiabotas, luego trabajador en La Manicera, cargando sacos de maní, luego como anunciador ambulante, y más tarde fue uno de los empresarios más exitosos de la radio y la televisión.
Recibió el principal premio del Casandra, El Soberano, el año pasado y uno de los estudios de la planta televisora Color Visión, donde realizó durante 25 años su programa Sábado de Corporán, lleva su nombre a partir del pasado fin de semana.
Su vida
Tanto en la radio como en la televisión su labor de ayuda era muy notoria en beneficio de los que menos tenían. Como radiodifusor, Corporán fue el creador del Circuito Corporán, con un grupo de emisoras en todas las regiones del país, y teniendo como cabeza a Radio Popular, emisora en la que mantuvo durante muchos años un servicio de ambulancia 24 horas al día para las personas de escasos recursos. Su programa radial “Gozando con Producciones Corporán” fue el de mayor audiencia los domingos en la capital. El Noticiario Popular, de Radio Popular, se convirtió en el más escuchado y reunió en su seno a las mejores voces de la época.
Ya estable en la radio el llamado “Viejo Corpo” incursionó en la televisión con impactante éxito, con su espacio Sábado de Corporán, uno de los de mayor audiencia en la televisión del país y el cual lo llevó a lograr uno de los mejores situales como conductor y productor del mismo. Durante 12 horas de programación Corporán innovó con el novedoso programa infantil “Sábado Chiquito de Corporán” que iniciaba desde la mañana y donde se formaron muchos talentos del país.Al mediodía continuaba con “Sábado de Corporán”, programa que se mantuvo por 25 años en el aire, y en el que se dio oportunidad a muchas figuras que hoy brillan en la televisión. Le sobreviven sus hijos Christian Corporán, Rafael Corporán Caimares (Raffito), Rafael Corporán y el pequeño Angel Luis, además de su ex esposa Grisell quien se mantuvo con él hasta la hora de su muerte.
Corporán en la política
Rafael Corporán de los Santos incursionó con éxito en la política, fue síndico del Distrito Nacional en el cuatrienio 1990-1994, en la boleta del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).
La dedicación a la gestión de sindico del Gran Distrito Nacional de entonces, marcado por las estrecheces económicas de la alcaldía, hizo que Corporán de los Santos descuidara su Grupo Radial y el propio programa de televisión.
Al dejar la alcaldía debió lidiar entonces con los problemas financieros de sus empresas.
Una de sus ambiciones había sido la construcción de la llamada “Ciudad del Niño”, una especie de albergue gigante para acoger a niños pobres, sin recursos y sin protección que deambulan por las calles.
Fue precisamente en las labores del cabildo donde sufrió una lesión que marcaría su vida, cuando se cayó en los alrededores del Mercado Nuevo viendo afectada su columna vertebral. Su salud se deterioró en los últimos años, viendo disminuir sus actividades.
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